Nacido bajo el signo de sagitario, Christopher Houweling es un artista joven originario de México D.F. Su infancia transcurrió en México pero también en América del Sur, pues se crió tanto aquí como en Argentina y Brasil. Como buen sagitario, nació viajero y la curiosidad que despiertan los viajes se manifiestan en su obra: su discurso es ecléctico, sus intereses múltiples y su mirada excéntrica.
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Autodidacta con formación en diseño gráfico y publicidad creativa, Christopher disfruta experimentar y dispara flechas por el placer de hacerlo, sin importarle mucho dónde vayan a dar o si dan al blanco: lo primordial es la intención, el mo-vimiento lúdico. Sus medios de expresión dependen de los medios que tenga a la mano, e igual trabaja con papel, dibujando con lápiz, pintando acuarelas, reciclando huacales para hacer pequeñas instalaciones–mini mundos imaginarios–, o confeccionando móviles de cartón. Su obra puede quedar plasmada en un lienzo, en una hoja de papel o en una escultura de molde, como sus bien conocidos bustos de Pakal, el señor de Palenque, que empiezan como busto maya y tras un proceso de metamorfosis se pueden convertir en Groucho o en Karl Marx, en John Lennon o en el Santo.
El humor y la ironía suelen permear su obra, y a menudo son su carta de presentación: no busca cambiar el mundo, pero sí nuestra forma de verlo y enfrentarlo. A veces se inspira en los aconte-cimientos cotidianos, los detalles del diario vivir, para hacer algún comentario al respecto; en otras ocasiones su mirada es meramente reflexiva y se limita a observar sin juzgar.
Ha participado en exposiciones colectivas en México, Uruguay y Argentina, y aquí en Valle ha realizado exposiciones individuales cuyo contenido seduce por la variedad de los medios a los que recurre. Su amor por la costa y el mar lo mantiene alejado de los bosques de Valle por el momento, pero tarde o temprano volverá con nosotros, armado de nuevas vivencias, para seguir deleitándonos con su idiosincrático imaginario.
por Antonio Papworth
